Con el azul turquesa como hilo conductor, el estudio vizcaíno Mugarri Interiorismo ha diseñado en su totalidad un piso de obra nueva que, además de destacar por una marcada personalidad, ofrece distintas soluciones de almacenamiento, realizadas con mobiliario a medida de Tegar.
Desde la zona de día hasta la zona de descanso, la coherencia visual se nutre de una paleta de colores azul, blanco y una tonalidad suave de madera, que transmite calma y bienestar. La denominada “Casa Turkesa” guarda coherencia con su nombre e incorpora el azul turquesa en todas las estancias.
Los dos dormitorios de la vivienda son un refugio acogedor que sigue esta línea cromática.
Un cabecero asimétrico en el dormitorio principal
La pared frontal del dormitorio se ha vestido con un papel pintado estampado con motivos vegetales en tonos azulados. El resto de paredes de la estancia están pintadas en azul turquesa. El techo blanco aporta profundidad y altura, que se potencia con una cornisa en todo su perímetro. Con diseño asimétrico, el cabecero -realizado por Tegar- combina una tonalidad muy clara de madera con el blanco impoluto de sus mesillas de noche con cajones.
Acorde con esta belleza desigual del cabecero, también se ha optado por elementos distintos para resolver la iluminación de la zona de la cama. A un lado un aplique de pared y, al otro, dos lámparas colgantes -todas en blanco-, excelentes soluciones lumínicas que aligeran el espacio de las mesillas de noche.
La ropa de cama se ha escogido en tonalidades blancas y crudo con textiles lisos, jugando con diferentes texturas naturales, que suman ligereza, confort y personalidad.
Una habitación infantil aprovechada al máximo
El espacio disponible en la habitación infantil se ha aprovechado al máximo, con espacio para almacenamiento, para el estudio y para descansar e incluso invitar a algún amigo/a a dormir. Como revestimiento se ha utilizado un papel pintado, con pequeños motivos geométricos, en tonos blancos y azules.
El mobiliario, tanto de la cama como los armarios, realizado por Tegar, se ha escogido en un acabado liso en madera muy clara.
Los textiles en tonos claros y pasteles consiguen suavizar la estancia y hacerla más atractiva para el público más joven de la casa. El aprovechamiento de la estancia es total gracias al armario esquinero, fabricado a medida por Tegar para exprimir hasta el último centímetro de almacenaje. La cama tipo nido, incluye una cama supletoria y dos amplios y prácticos cajones.
Frente a la cama, un cómodo escritorio, diseñado también por Tegar, con una mesa amplia, estanterías, armarios y distintas cajoneras que facilitan que todo esté en orden.
Fotos: Biderbost Photo